El tratamiento de la rosácea se centra en controlar los signos y síntomas. En la mayoría de los casos, esto requiere una combinación de un buen cuidado de la piel y tratamientos especificos
La terapia con láser puede hacer menos visible el agrandamiento de los vasos sanguíneos. Dado que el láser se dirige a las venas visibles, es más eficaz en la piel que no está bronceada, o que no es morena ni negra.
Habla con el médico acerca de los riesgos y beneficios de la terapia con láser. Los efectos secundarios de la terapia con láser para la rosácea incluyen hinchazón y hematomas que pueden durar varios días. Durante el período de recuperación, será necesario aplicar hielo y un cuidado suave de la piel. En las pieles morenas o negras, el tratamiento con láser puede provocar una decoloración duradera o permanente de la piel tratada.
Es posible que el efecto completo del tratamiento no se note durante semanas. Es posible que se necesiten tratamientos repetidos periódicamente para mantener la apariencia mejorada de la piel.
El tratamiento con láser para la rosácea suele considerarse un procedimiento cosmético, que los seguros no suelen cubrir.